Día 2
invisibilidad
De
niña, cuando jugabas a los “súper héroes”, siempre te hacían la misma pregunta:
—Si
pudieras tener un súper poder, ¿cuál te gustaría tener? —
A lo
que tú, con la ingenuidad conferida por la dulce infancia, siempre
respondías:
—invisibilidad—
¿Te das
cuenta que, de una u otra forma, la has obtenido?
Si, ¡ya
se! No es tal cual lo esperabas
pero… A los ojos de tus, ¿Cuántos eran?, 110 “amigos” te has convertido en alguien “invisible”.
Y es
qué si bien antes sabían, casi en
tiempo real, que estabas haciendo,
dónde y con quién; qué comías, bebías y evitabas; que corte de cabello traías, el
color y diseño de tus uñas, si usabas tenis o zapatos… momento ¡siempre usas
tenis! cuántos kilómetros habías corrido, pedaleado o caminado; en que
“proyecto” tenias pensado perder el tiempo, si hacías sellos, dibujos, pasteles y ¡corajes!, etc. ahora no tienen idea de N-A-D-A.
Cuando
mucho sabrán, o han de suponer que sigues viva , y eso por aquello de que las
malas noticias vuelan…
Hoy por
hoy, y al haberte “bajado del mundo” tu rango de visibilidad se limita a unos
cuantos metros, a unas cuantas
personas… Interesante ¿no?
Sin embargo
algo hace falta….